El país tocó fondo en la política

Anónimo, circula en redes sociales.

"En cualquier país, con mediana cultura electoral, es un gran honor la designación como candidato a asambleista, legislador, diputado o congresista y por supuesto para presidente y vicepresidente, más aún, ganar por la confianza del pueblo en elecciones transparentes y desempeñar un cargo de servicio público con altura y dignidad, sabiendo que están representando al pueblo que les dio su confianza a través del voto y están representando a ese electorado.

En Ecuador, cualquier delincuente sentenciado, convicto prófugo de la justicia, huidos y juzgados por delitos de actos de corrupción, tales como peculado, enriquecimiento ilícito, concusión, colusión, cohecho, tráfico de influencias, testaferrismo, lavado de activos, asociación ilícita y delincuencia organizada, se amparan en la inmunidad electoral que les da una candidatura para lograr impunidad de los delitos que cometieron.

Lo usual ha sido que la Policía detenga a los corruptos y la justicia les suelte, ahora en época electoral resulta que los corruptos sometidos a la justicia y hasta con sentencias, primero las organizaciones políticas y luego el pueblo con su voto, les salve.

El elector que vota por un delincuente sabe lo que hace, no se trata de ingenuidad, es que forma parte del propio pillo sea como autor, cómplice o encubridor de estos malandros.

Ecuatoriano...

• ¿te sientes representado por un delincuente?
• si quieres dar tu confianza a un candidato de esa calaña, piensa en el país que quieres para las futuras generaciones.
• razona tu voto. No le des tu confianza a delincuentes que a través de tu voto lo que quieren es inmunidad electoral y luego impunidad."

Las personas que nacen para robar

Autor anónimo  

 

Una linda muchacha llamada Magguie se fue al campo y le compró un burro a un viejo campesino por $ 200 dólares. El anciano acordó entregarle el animal al día siguiente.

Pero al día siguiente el campesino le dijo:

• Lo siento, Magguie, pero tengo malas noticias: el burro murió.
• Bueno, dijo Magguie entonces devuélvame mi dinero.

El vendedor replicó:

• No puedo. Ya me lo gasté.

Magguie le dijo:

• Bien. Igual entrégueme el burro.
• ¿Y para qué? preguntó el anciano, ¿Qué vas a hacer con él?
• Lo voy a rifar -contestó Magguie.
• Estás loca, cómo vas a rifar un burro muerto?
• Es que no le voy a decir a nadie que está muerto, por supuesto.

Un mes después de este suceso, el campesino encontró nuevamente a Magguie y le preguntó:

• ¿Qué pasó con el burro?

Magguie respondió:

• Lo rifé, vendí 500 números a $ 10 cada uno y gané $ 5000 dólares
• ¿Y nadie se quejó? Preguntó el viejo.
• Solamente el ganador -le dijo Magguie-, pero a él le devolví sus $ 10 dólares

Magguie creció y de repente se hizo política. Hasta llegar a ser Alcaldesa, Gobernadora, Asambleísta, después Ministra, y de la misma forma usó el dinero de todos. Y ese dinero fue a parar ¡¡¡a sus bolsillos!!! y todos sabemos de qué forma… Una mujer, que durante su vida nunca trabajó como Dios manda, ni hizo nada productivo ahora es muy rica... Porque encontró muchos burros muertos en su camino y los fue rifando a mucha gente ingenua.

Pero lo mejor de esta historia es que sigue encontrando más burros muertos. (¡Quiere ser Asambleísta de nuevo!)

Hay muchos que no tienen sangre en la cara.

Tú no puedes dejar que te sigan vendiendo burros muertos.... Estemos alertas.

Abre tus ojos y mejor aún tu mente, tu criterio y mucho sentido común.

Piensa en tus hijos y tu familia.

Ustedes pueden ayudar a que paren de vendernos burros muertos compartiendo esta historia.

"Un pueblo que vota por corruptos, ladrones... No es víctima... Sino cómplice"

G. Orwell