domingo, 6 de julio de 2025

Eso es cultura

  
 

 
 
"Si tú tienes un sándwich y yo tengo un dólar, y usamos ese dólar para hacer un intercambio, al final tú tendrás el dólar y yo el sándwich.

Lo material cambia de manos, pero no se multiplica.
Lo que uno gana, el otro lo pierde.
Es simple economía.

Pero hay otra forma de intercambio que no obedece esas reglas.

Si tú conoces el teorema de Pitágoras, o un soneto de Verlaine, y decides compartirlo conmigo, algo sorprendente ocurre: tú sigues teniéndolo… y ahora yo también.

El conocimiento, al compartirse, no se divide: se multiplica.

La cultura no se gasta. No se agota. No se parte como una moneda, ni desaparece como un pedazo de pan.
Se expande. Crece. Se reproduce en la mente de quien la escucha, la lee, la entiende.

Michel Serres lo dijo con precisión:

“Y mientras la mercancía se consume, la cultura se expande sin fin.”

Una lección sencilla… pero transformadora.
Porque compartir ideas no empobrece a nadie.
Al contrario: nos enriquece a todos."
 
 
Recibí este texto, que lo compartió mi compañero de colegio Patricio Coba, al validar el texto para ubicar al autor encontré algunas referencias, es un parafraseo a la publicación  Eso es cultura. Michel Serres

 






"Ensayista, epistemólogo y filósofo francés. Nació en Agen en 1930 y cursó estudios en la escuela naval. Posteriormente prosiguió estudios de filosofía y se doctoró con una tesis sobre Leibniz (El sistema de Leibniz y sus modelos matemáticos, 1968). Fue profesor en la universidad de Clermont-Ferrand y en la Sorbona, donde ejerció como profesor de historia de las ciencias. Desde 1976 enseña en la universidad de Stanford en los Estados Unidos. Es el director del «Corpus des Oeuvres de philosophie en langue française» y en 1990 fue elegido miembro de la Academia Francesa...."
 
 
En primera persona
 
A mis estudiantes, nativos digitales, les compartía esta historia, mas o menos parafraseada, en las "Divagaciones de Morales"
 
Solían hacerme preguntas sobre mi asignatura y  la mayoría de veces les contestaba.
 
También les decía "Si me hacen una pregunta que no lo sepa, a esta altura de mi vida no me sonrojaré, iré a a casa y consultaré sobre el tema"
 
Invitaba a mi interlocutor que nos explique sobre su pregunta, ya venían con conocimiento de causa y tenía un tiempo para que compartan su conocimiento. 
 
Les pedía que cuando trabajen y se incorpore un compañero nuevo, le enseñen lo que saben. no se debe ser egoísta.
 
Si el compañero nuevo, con el tiempo les supera en conocimiento, posiblemente les ayude.
 
Si el compañero nuevo, no les supera, posiblemente el realice su trabajo y Ud estará involucrado en algo más avanzado. 
 
Eventualmente me encuentro con algún ex-estudiante, ahora Ingeniero, y alguno hace una pregunta sobre tecnología, recordando las de clases. O me me comentan algo de su trabajo.
 
Sonrió y le pido que me explique. 
 
Algunas respuestas puedo conocer, prefiero que tengan su momento de felicidad.
 
Suelo indicar al su acompañante (esposita e hijos) que fue mi estudiante en Sistemas Operativos y que tuvo excelentes calificaciones.
 
Que obtuvo dos 20 y un sólo 19, en Sistemas Operativos I. La familia me mira con asombro. ¡Qué memoria!
 
Claro, tengo un récord, todo el tiempo de Docente estuve asignado a Sistemas Operativos I, las calificaciones no recuerdo y debo hacer quedar bien a mi ex-estudiante.
 
Le consulto al Ingeniero si me puede ayudar con su número de celular para no perder el contacto y le timbro, le llamo por su nombre.
 
Con asombro dicen "¿Se acuerda de mi nombre?"
 
Les indico que cuento con una ayuda  Aplicación Apps para identificar llamadas y bloquear spam: Truecaller, compartimos alguna aplicación que se utiliza.
   
Les indico el número de estudiantes, que está publicado en: Confieso: Soy Docente

 
Le consulto Por favor, ¿libro más reciente que ha leido?
 
Suelen indicar un título  o ...
 
Sonreímos y me despido con afecto.
 
 
 

Poema: Nanas de la cebolla de Miguel Hernández. Interpreta Joan Manuel Serrat



Nanas de la cebolla. Miguel Hernández.


"«Esta semana, como las anteriores, llega martes y no ha llegado tu carta. También empiezo a escribir ésta para que me dé tiempo a echarla después, cuando el correo me traiga la tuya, que no creo que falte hoy. Estos días me los he pasado cavilando sobre tu situación, cada día más difícil. El olor de la cebolla que comes me llega hasta aquí, y mi niño se sentirá indignado de mamar y sacar zumo de cebolla en vez de leche. Para que lo consueles, te mando esas coplillas que le he hecho, ya que aquí no hay para mí otro quehacer que escribiros a vosotros y desesperarme».

Carta de Miguel Hernández desde la cárcel de Torrijos a su esposa Josefina Manresa (Madrid, 12 de septiembre 1939)


Nanas de la cebolla.

La cebolla es escarcha
cerrada y pobre:
escarcha de tus días
y de mis noches.
Hambre y cebolla:
hielo negro y escarcha
grande y redonda.

En la cuna del hambre
mi niño estaba.
Con sangre de cebolla
se amamantaba.
Pero tu sangre
escarchaba de azúcar,
cebolla y hambre.

Una mujer morena,
resuelta en luna,
se derrama hilo a hilo
sobre la cuna.
Ríete, niño,
que te tragas la luna
cuando es preciso.

Alondra de mi casa,
ríete mucho.
Es tu risa en los ojos
la luz del mundo.
Ríete tanto
que en el alma, al oírte,
bata el espacio.

Tu risa me hace libre,
me pone alas.
Soledades me quita,
cárcel me arranca.
Boca que vuela,
corazón que en tus labios
relampaguea.

Es tu risa la espada
más victoriosa.
Vencedor de las flores
y las alondras.
Rival del sol,
porvenir de mis huesos
y de mi amor.

La carne aleteante,
súbito el párpado,
y el niño como nunca
coloreado.
¡Cuánto jilguero
se remonta, aletea,
desde tu cuerpo!

Desperté de ser niño.
Nunca despiertes.
Triste llevo la boca.
Ríete siempre.
Siempre en la cuna,
defendiendo la risa
pluma por pluma.

Ser de vuelo tan alto,
tan extendido,
que tu carne parece
cielo cernido.
¡Si yo pudiera
remontarme al origen
de tu carrera!

Al octavo mes ríes
con cinco azahares.
Con cinco diminutas
ferocidades.
Con cinco dientes
como cinco jazmines
adolescentes.

Frontera de los besos
serán mañana,
cuando en la dentadura
sientas un arma.
Sientas un fuego
correr dientes abajo
buscando el centro.

Vuela niño en la doble
luna del pecho.
Él, triste de cebolla.
Tú, satisfecho.
No te derrumbes.
No sepas lo que pasa
ni lo que ocurre."
 








Miguel Hernández


 
 
"(Orihuela, 1910 - Alicante, 1942) Poeta español. Adscrito a la Generación del 27, Miguel Hernández destacó por la hondura y autenticidad de sus versos, reflejo de su compromiso social y político. Nacido en el seno de una familia humilde y criado en el ambiente campesino de Orihuela, de niño fue pastor de cabras y no tuvo acceso más que a estudios muy elementales, por lo que su formación fue autodidacta...."

Tomás Fernández y Elena Tamaro. «Biografia de Miguel Hernández» [Internet]. Barcelona, España: Editorial Biografías y Vidas, 2004. Disponible en https://www.biografiasyvidas.com/biografia/h/hernandez_miguel.htm [página consultada el 6 de julio de 2025].

  

sábado, 5 de julio de 2025

El Sabio y el Joven frustrado

 
 

 
  
"Vengo, maestro, porque me siento tan poca cosa que no tengo fuerzas para hacer nada. 
           😟

Me dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe y bastante tonto. ¿Cómo puedo mejorar? ¿Qué puedo hacer para que me valoren más?
            👨🏼‍🦱

El maestro sin mirarlo, le dijo:
-Cuánto lo siento muchacho, no puedo ayudarte, debo resolver primero mi propio problema. 

Quizás después... y haciendo una pausa agregó: si quisieras ayudarme tú a mí, yo podría resolver este problema con más rapidez y después tal vez te pueda ayudar.
        👨🏻‍🏫💬👨🏼‍🦱

- En.encantado, maestro- titubeó el joven, pero sintió que otra vez era desvalorizado y sus necesidades postergadas. 

Bien, asintió el maestro. Se quitó un anillo que llevaba en el dedo pequeño y dándoselo al muchacho, agregó:
          👨🏻‍🏫👉🏻  💍

Toma el caballo que está allá afuera y cabalga hasta el mercado. Debo vender este anillo porque tengo que pagar una deuda. Es necesario que obtengas por él la mayor suma posible, pero no aceptes menos de una moneda de oro. Ve y regresa con esa moneda lo más rápido que puedas.
           👉🏻🔵

 El joven tomó el anillo y partió.
            💍🏃🏾

Apenas llegó, empezó a ofrecer el anillo a los mercaderes.

Estos lo miraban con algún interés, hasta que el joven decía lo que pretendía por el anillo.
            👨🏼‍🦱$$

Cuando el joven mencionaba la moneda de oro, algunos reían, otros le daban vuelta la cara y solo un viejito fué tan amable como para tomarse la molestia de explicarle que una moneda de oro era muy valiosa para entregarla a cambio de un anillo.
               👴🏻💬💍

 En el afán de ayudar, alguien le ofreció una moneda de plata y un cacharro de cobre, pero el joven tenía instrucciones de no aceptar menos de una moneda de oro y rechazó la oferta.
            ❌

 Después de ofrecer su joya a toda persona que se cruzaba en el mercado, más de cien personas, abatido por su fracaso montó su caballo y regresó.
                    ⬅🏇🏼

 ¡Cuánto hubiera deseado el joven tener esa moneda de oro! Podría entonces  habérsela entregado él mismo al maestro para liberarlo de su preocupación y recibir entonces su consejo y ayuda. 
              😔💭

Entró en la habitación
Maestro -dijo- lo siento, no se puede conseguir lo que me pediste. Quizás pudiera obtener dos o tres monedas de plata, pero no creo que yo pueda engañar a nadie respecto del verdadero valor del anillo.
          👨🏼‍🦱😟$$💍

- Qué importante lo que dijiste, joven amigo -contestó sonriente el maestro-.
            👨🏻‍🏫💬😃

 Debemos saber primero el verdadero valor del anillo.
               ❓$$

 Vuelve a montar y vete al joyero. ¿Quién mejor que él para saberlo?
                🔎

 Dile que quisieras vender el anillo y pregúntale cuánto te da por él.  
Pero no importa lo que ofrezca, no se lo vendas. Vuelve aquí con mi anillo.
                 👨🏼‍🦱💬⬇💍

 El joven volvió a cabalgar. 
               🏇🏼

El joyero examinó el anillo a la luz del candil con su lupa, lo pesó y luego le dijo:
                 🧐💍

- Dile al maestro, muchacho, que si lo quiere vender ya, no puedo darle más que 58 monedas de oro por su anillo.
                  🧐💰

- ¡58 MONEDAS! -exclamó el joven.
               👨🏼‍🦱❓💰

- Sí, -replicó el joyero- yo sé que con tiempo podríamos obtener por él cerca de 70 monedas, pero no sé... si la venta es urgente...

El joven corrió emocionado a la casa del maestro a contarle lo sucedido.
                   🏡 🏃🏾

- Siéntate -dijo el maestro después de escucharlo- Tú eres como este anillo: Una joya, valiosa y única.
          👨🏻‍🏫💬💎

Y como tal, sólo puede evaluarte verdaderamente un experto. ¿Qué haces por la vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor? 
Y diciendo esto, volvió a ponerse el anillo en el dedo pequeño.
               ☝🏻💍

Todos somos como esta joya, valiosos y únicos  y andamos por los mercados de la vida pretendiendo que gente inexperta nos valore.
             👨🏻‍🏫💬📃

SIEMPRE RECUERDA LO MUCHO QUE TÚ VALES, AUNQUE QUIZÁS, ALGUNAS PERSONAS A TU ALREDEDOR NO TE LO DEMUESTREN."

                💍 💎 "
 
Anónimo
 
 

Libro de poemas Tardía Calma de Fabián Guerrero Obando, 2025/07/05

 

 

Presentación del libro de poemas Tardía Calma de Fabián Guerrero Obando el 5 de julio de 2025

 
La previa

 

 

 

 

 

 







 
 
 
Panel
 
 
 
 

Presentación de Ensamble Vocal Mallku

 

  El Gabán - Ensamble Vocal Mallku

 
 

 


Asistentes

 

 

 


 

Las ventajas de envejecer




"No cambiaría a mis grandes amigos, mi maravillosa vida ni a mi amada familia por menos canas o un abdomen más plano.

Con los años, me he vuelto más amable conmigo mismo, menos crítico. Me he convertido en mi mejor amigo.

Ya no me culpo por comer una galleta extra, por no tender la cama o por comprar algo innecesario. Me he dado el derecho de ser desordenado y un poco extravagante.

He visto partir a muchos amigos demasiado pronto, antes de que pudieran disfrutar de la libertad que trae envejecer.
¿Quién me juzgará si decido leer hasta las cuatro de la mañana o dormir hasta el mediodía?
¿Quién me impedirá disfrutar del tiempo en la cama o frente al televisor si así me hace feliz?

Bailaré al ritmo de esos maravillosos éxitos de los 70 y 80, y si de repente lloro por un amor perdido, también será parte de mi historia.

Si quiero, caminaré por la playa en shorts ajustados sobre un cuerpo ya flácido, y me lanzaré al mar sin vergüenza, aunque otros me miren con desaprobación... Ellos también envejecerán.

A veces olvido cosas, es verdad. Pero las importantes siempre las llevo en el corazón.
Claro que la vida me ha roto el corazón más de una vez, pero esas cicatrices me dieron fuerza, comprensión y compasión.
Un corazón que nunca ha sufrido es estéril y jamás conocerá la alegría de ser imperfecto.

Tengo la suerte de haber vivido lo suficiente para ver mis canas y conservar la risa de juventud marcada en mi rostro.
Muchos nunca rieron, muchos se fueron antes de que sus cabellos se tiñeran de plata.

Con la edad, preocuparse por el qué dirán pierde sentido.
Ya no dudo de mí mismo: me he ganado el derecho a equivocarme.

¿Me gusta ser mayor?
 
Me encanta la persona en la que me he convertido.
No viviré para siempre, pero mientras esté aquí, no perderé el tiempo lamentándome por lo que pudo ser o temiendo lo que vendrá.
Y si quiero, comeré postre todos los días.

Que nuestra amistad nunca termine, porque nace del corazón.

©️ Gabriel García Márquez (1927–2014), escritor colombiano, Premio Nobel de Literatura."
 
PD. He ubicado este texto en algunos sitios, no indican el Autor para validar
 
 

viernes, 4 de julio de 2025

Expreso: La corrupción no soy yo

 




Recibí una imagen con un texto La corrupción no soy yo.

Al validar la fuente ubiqué que era una publicación de 24 de octubre de 2019 en el Diario Expreso.

Creo que es algo que está más vigente que nunca.

 




La corrupción no soy yo

"Soy el médico que ordena exámenes complejos, quizá innecesarios, en el laboratorio que me paga por cada cliente que le doy. Soy el abogado que se inventa gastos que no hace y coimas que no reparte. Y de los que estafan al fisco, yo soy el contador.

Soy los 40.000 burócratas que alargan o entorpecen un trámite por el cual el Estado les paga a tiempo, y bien. Soy los 15.000 conductores multados cada mes por estacionar en doble fila, y los miles más que no lo fueron por manejar viendo el celular.

Soy el tendero que usa balanzas amañadas. Soy el proveedor que infla los costos y el gerente de Suministros que se lleva el sobreprecio. Soy el supermercado que paga a sus proveedores cada 3 meses, aunque recibe a diario el fruto de sus ventas. Soy los cientos de jueces o fiscales que tarifan sus providencias y sus dictámenes. Y soy los tribunales que cobran por liberar o encarcelar, sin que cuente la inocencia o la culpabilidad.

Soy quien contrata a extranjeros para “ayudarlos” y les paga menos del sueldo vital. Soy el empresario que retiene los aportes al IESS de sus trabajadores, y soy los trabajadores que pasan 2 horas chateando vía WhatsApp. Soy la Comisión que amaña concursos que llama de méritos, pero son de compadrazgos. Soy el profesor que no va a clases o va poco, pero cobra todo el sueldo sin titubear. Soy el alumno que plagia sus tesis o sus tareas. Y soy tooodas las universidades que lo saben, pero no hacen nada por cambiar.

Soy las 120 mil amas de casa que no afilian a sus empleadas y soy las empleadas que roban comida a sus jefas. Soy el bacán que escucha música como si viviera en un descampado, bota basura donde se le canta e insulta a quien le reclama. Soy el padre que inculca a su hijo que lo importante es tener, llegar como sea. Ganar.

Soy, en fin, el ciudadano bueno, devoto y honesto, patriota y trabajador, que maldice haber nacido en Ecuador. Porque alguien nos desgració la vida llenándola de políticos corruptos. Son ellos los culpables, los que joden a la nación. ¡¿Quién diablos los habrá elegido?! Siempre me lo pregunto. Porque la corrupción son ellos: la corrupción no soy yo."
 
 







 

sábado, 28 de junio de 2025

ABC La soledad del adolescente frente a las pantallas, un fenómeno que se recrudece durante las vacaciones

 


 

"La ONG Educo denuncia que más de 375.000 niñas y niños de 6 a 13 años en España (un 10 % del total) tienen las llaves de casa y pasan el día solos.
 
Un día cualquiera de la pasada semana, Carmen hizo la prueba. Retiró el móvil a su hijo entre las 11:00 pm. y las 7:00 am., momento en el que descubrió que el adolescente, de 14 años recién cumplidos, tenía 640 mensajes de WhatsApp repartidos en tres chats, todos enviados de madrugada. «De día está en casa sin campamento e intuimos que puede ser peor. Entendimos que teníamos que tomar de forma urgente cartas en el asunto», admite esta mujer.

La realidad, tal y como recoge el último informe de la ONG de infancia y educación Educo, 'Niños de la llave III: la vida empantallada', es que «estamos dejando que se acuesten y se levanten con el móvil» y que «hay madres que nos dicen que no saben qué hacer para que sus hijos se duerman sin el teléfono. Ya lo consideran normal». En verano, sin madrugones escolares de por medio, ni campamentos a la vista, todo esto empeora.

Con el final del curso escolar y el inicio de las vacaciones, miles de niños y adolescentes en se enfrentan a casi tres meses sin clases, rutinas y, en muchos casos, ni alternativas reales de ocio saludable. Tal y como denuncia esta ONG, más de 375.000 niñas y niños de 6 a 13 años en España (un 10 % del total) tienen las llaves de casa y pasan horas del día solo porque sus padres y madres no pueden acompañarlos, ya sea por falta de recursos económicos, de tiempo o de redes familiares.

El informe que acaba de sacar la entidad, 'Niños de la llave III: la vida empantallada', sitúa el foco en una nueva forma de soledad: la que ocurre frente a las pantallas, especialmente durante las vacaciones de verano. «La soledad no ha desaparecido, sino que se ha transformado adentrándose en el mundo digital. Durante el verano, la situación se agrava, ya que la falta de actividades y acompañamiento multiplica las horas de exposición a las pantallas», explica Guiomar Todó, director general adjunto de Educo.

El informe, basado en una encuesta a 2.316 familias de toda España con hijos e hijas de 6 a 13 años, revela que los niños y niñas reciben su primer teléfono inteligente con solo 9 años y 10 meses , mientras que las llaves de casa llegan un año y medio después, cumplidos los 11 años y un mes. Se trata de una inversión simbólica de los 'rituales de autonomía' donde el móvil se convierte para muchas familias en la forma de 'controlar» a sus hijos e hijas cuando están solos, coincidiendo muchas veces con el paso de primaria a secundaria. Con 10 años, el 60 % ya tiene móvil, cifra que asciende al 93 % al cumplir los 13, siendo de 9 a 15 el 'segundo periodo sensible de aprendizaje', un momento crucial para su desarrollo cognitivo, social y emocional.

Según la encuesta de Educo, alrededor del 40% de padres y madres afirma que sus hijos e hijas están 'más' o 'mucho más' expuestos a pantallas en verano. El resto del año, la encuesta revela que solo con el teléfono inteligente pasan 2:35 horas diarias, alcanzando las 3 horas de media diarias el fin de semana , con un uso simultáneo de varios dispositivos lo cual eleva el tiempo total de exposición a pantallas. El 62,2 % de las madres y padres encuestados afirma que sus hijos usan pantallas para tareas escolares, pero más del 50 % reconoce también su uso para ver series, jugar online o chatear, muchas veces hasta bien entrada la noche.

Brecha entre percepción y evidencia

Uno de los hallazgos más relevantes del informe es la brecha entre lo que perciben madres y padres y lo que alertan a los especialistas consultados y las entidades sociales con las que trabaja Educo. Aunque la evidencia científica y educativa coincide en señalar múltiples efectos perjudiciales del uso excesivo de pantallas, las familias no siempre lo reconocen: Solo un 36% de madres y padres ve relación clara entre uso de pantallas y problemas de sueño, y tan solo un 33% reconoce el vínculo con la ansiedad, el estrés o la depresión. Además, menos de la mitad de las familias encuestadas (43,4 %) consideran que la atención y la concentración resultan afectadas, y solo el 35,3 % está de acuerdo con que perjudica al rendimiento escolar.

En contraste, las entidades sociales denuncian a diario los efectos de esta sobreexposición. Desde la Asociación Barró (Madrid), lanzan una advertencia clara: «Por desgracia, es muy común el caso de chicos y niñas de 9 o 10 años que se quedan jugando a la Play o con el TikTok hasta la madrugada. Se nota cuando el menor ha dormido poco: no atienden, están más dispersos, más enfadados».

A su vez, desde la organización Farrah (Gran Canaria) señalan: «Nos encontramos con niños y niñas que necesitan estímulo constante; en el momento en que no hay estímulo, se salen de la actividad». Añaden además que muchos niños y niñas acuden a sus espacios tras haber estado enganchados al móvil hasta altas horas de la noche. Esta sobreexposición afecta, además del descanso, a la capacidad de atención y autorregulación, tal como explica Joan Paul Pozuelos, neurocientífico de la Universidad de Granada , la autoestima y el vínculo con sus iguales.

La soledad de sus cuartos

Por otro lado, casi un 40% de madres y padres no percibe una relación directa entre el uso de pantallas y la sensación de soledad no deseada o el aislamiento social. Sin embargo, de nuevo, desde las entidades sociales, que Educo apoya para organizar campamentos de verano, la percepción es muy distinta. «Incluso cuando los niños no están solos de forma física, muchas veces buscan la soledad en sus cuartos, sobre todo con el móvil y la tablet, porque están enganchados a estas tecnologías», dicen desde Farrah.

Pero esta actitud no es inocua. Este tipo de soledad tiene consecuencias emocionales y relacionales. El informe de Educo recoge estudios que vinculan el aislamiento infantil con una baja autoestima, mayor inseguridad, dificultades para generar vínculos sanos y una menor percepción de bienestar general.

Finalmente, cerca de la mitad de las familias encuestadas (45,9 %) no considera que exista una relación relevante entre el uso de pantallas y el hecho de sufrir alguna situación de acoso . Sin embargo, se ha detectado que las pantallas han ampliado la extensión e intensidad de distintos tipos de violencia contra la infancia, generando en concreto un solapamiento entre acoso escolar y ciberacoso. Hay una sensación de impunidad en las agresiones, tal como resume una educadora: «al estar detrás de una pantalla, parece que no duele».

A pesar de los elementos perniciosos de la sobreexposición y los contenidos de riesgo de los dispositivos, según el informe de Educo los niños y niñas sí perciben que las redes sociales los ayudan a sentirse seguros e independientes. Que gracias a Internet pueden aprender más allá de las aulas, o descubrir nuevas aficiones. También, les hacen sentir que forman parte de un grupo. «Es indudable que las redes, tal y como está hoy configurada la sociedad, ayudan a hacer amigos, a no sentirse solos y solas. Lo que no impide reconocer que hay riesgos y deben atenderse», remarca la directora adjunta de Educo.

Infraprotección digital

El informe recoge además que casi un tercio de las familias no pone límites efectivos al uso de dispositivos. Un 20,8 % no aplica ninguna restricción, y un 8,3 % se lo ha planteado, pero no sabe cómo hacerlo. Solo un 42,9 % utiliza sistemas digitales de control parental, y un 35,6 % establece acuerdos verbales o escritos. Y estos sistemas no son los más eficaces según el especialista en sociología de la infancia, Kepa Paul Larrañaga, uno de los expertos participantes en el Anteproyecto de Ley de Protección en Entornos Digitales.

Está claro que las pantallas han llegado a los hogares sin preparación suficiente . «Estamos criando a una generación en la que la autonomía viene sin acompañamiento, sin orientación ni apoyo, y donde la tecnología sustituye elementos esenciales para su desarrollo, como puede ser el juego libre con sus amigos y amigas. Esta infra protección en el mundo digital provoca una brecha, no tanto en quién tiene acceso a la red sino entre quién está más protegido o no», señala Todó.

Educo insiste en la importancia de acompañar a las familias, ya que a muchas les falta información, pero también les falta red, apoyo y tiempo. «No podemos delegar en madres y padres una responsabilidad tan grande sin acompañarlos ni ofrecerles alternativas reales. Mientras tanto, hay miles de niños que están siendo moldeados por una tecnología que no les pide permiso», dice Todó.

Además, la ONG insiste en la necesidad de una educación protectora: «No se trata de prohibir, sino de educar y acompañar a todos los actores implicados, no solo a las familias, en un uso saludable para el bienestar de la infancia y la adolescencia. Generar un entorno digital seguro que promueve la protección individual de los propios chicos y chicas, pero también la que ejercen familias, centros educativos, entorno local y Administraciones Públicas. «Ya no podemos mirar a otro lado, tenemos un problema y hay que tomar medidas urgentes», denuncia«.

En verano, espacio idóneo para garantizar el bienestar de la infancia a través del ocio y el juego al aire libre, Educo también reivindica el valor de los campamentos y colonias como lugares protectores alternativos a las pantallas que fomentan el desarrollo de habilidades físicas, sociales y emocionales, especialmente para aquellos niños y niñas que no pueden contar con acompañamiento durante las vacaciones.

«El verano es una oportunidad para reconstruir vínculos, recuperar el juego compartido y ofrecer experiencias reales de pertenencia. Los campamentos y colonias no son un lujo, son una necesidad para garantizar el derecho a una infancia con relaciones, afecto y tiempo de calidad», afirma Todó.

Desde la organización se insiste en que las administraciones públicas —desde el nivel estatal hasta el autonómico y local— deben asegurar durante el verano al menos quince días de actividades de ocio educativo, clave para el desarrollo integral de la infancia, complementar lo aprendido durante el curso escolar, y garantizar su derecho al juego. Estas actividades deben priorizarse como gratuitas para los niños, niñas y adolescentes en riesgo de pobreza o exclusión social y garantizar al menos una comida al día, entre otras recomendaciones .
 
Para asegurar el diseño de políticas públicas adecuadas, resulta imprescindible que los diferentes niveles de la administración dispongan de datos estadísticos sobre el acceso a actividades de ocio y tiempo libre en periodos no lectivos. «Hay infancia que se pasa el verano sola en casa, y hay infancia que, gracias a una colonia, puede jugar y convivir con otros. Esa diferencia marca su desarrollo emocional, su autoestima y su forma de relacionarse con el mundo», dice Todó. "
 
 
ONG de infancia y educación Educo