En el artículo ¿Cómo serán las universidades en 2030?
"¿Y si intentamos predecir el futuro de la educación para ofrecer mejores competencias a los estudiantes?
Varios expertos opinan sobre cómo creen que será la educación universitaria en 2030.
El futuro pasa por revisar las formas de evaluación y encontrar un equilibrio entre la tecnología y el desarrollo humano.
Con mayor o menor relevancia, todos los expertos coinciden en que la robótica y la inteligencia artificial modificarán muchos aspectos de nuestra vida y, por tanto, del tipo de estudios y conocimientos necesarios para enfrentarse a los problemas del futuro.
Hay muchos docentes que muestran una visión más desoladora y creen que el sistema universitario desaparecerá, debido al aprendizaje automático y la escasez de trabajos en los que se necesiten habilidades académicas. Ellos creen que las máquinas se ocuparan de ese tipo de profesiones como, por ejemplo, de realizar diagnósticos médicos o las intervenciones quirúrgicas desarrolladas por robots.
Ante este panorama, ¿qué motivará a los estudiantes para involucrarse en un proceso de formación superior?
Afortunadamente, hay muchos expertos que creen que no habrá una ruptura, sino que debemos prepararnos y trabajar para una evolución en el ámbito universitario, además de cambiar el orden de prioridades.
Punto de encuentro para encontrar motivación y compartir experiencias
La universidad más que un centro de aprendizaje será visto como una comunidad colaborativa donde compartir ideas y trabajar en proyectos.
No se recurrirá al docente para la transmisión de conocimientos, sino como guía y asesor para poner en práctica ideas e hipótesis.
El docente trabajará en la creatividad y en la colaboración y estos serán los objetivos de su programa educativo.
De este modo, el aula será un espacio de interacción y no de enseñanzas magistrales.
El aprendizaje sobrevive, pero modificado
Los cursos en línea, masivos y abiertos (MOOC) serán los medios por donde los estudiantes adquieran conocimientos, de forma libre e independiente.
El profesor colaborará en proveer conocimientos, junto a los dispositivos de aprendizaje automático. Las máquinas tendrán el peso de la materia y los estudiantes accederán y seleccionarán qué quieren aprender.
El docente actuará de forma remota, como tutor virtual, y al ritmo de cada estudiante. Esto facilitará el acceso a la educación, la hará más asequible y flexible.
Relevancia de crear mentes críticas
Una mente analítica será el atributo fundamental de los graduados.
En las conferencias, coloquios y aulas se trabajará en que los estudiantes aprendan a tener una mente clara, centrada y analítica.
Espacios para pensar sin el uso de tecnologías
Las salas de conferencia y seminarios serán espacios de debate y de colaboración.
Se incentivará el diálogo y el recurrir a mapas conceptuales y pizarras para trabajar en las ideas.
Se intentará preservar el uso del papel y el lápiz para argumentar y razonar.
¿Quieres ser un agente del cambio?
Comienza a prepararte con una buena formación
El peso de la investigación
El equipo académico destinará más tiempo a las investigaciones.
Se apostará por la creación de laboratorios comunitarios que funcionarán como los coworkings para emprendedores. Serán espacios dotados de los equipos necesarios y con un ambiente proclive a la innovación y el desarrollo de hipótesis y pruebas.
Competencias sobre conocimientos
Se valorarán otra gama de características, tanto a la hora de evaluar a los estudiantes, como a la hora de valorar su empleabilidad.
Las habilidades blandas serán más vitales y necesarios en los ambientes corporativos. La ética o la inteligencia emocional serán puestas a prueba, a la hora de demostrar la validez profesional de un graduado."
eAtlas de la UNESCO para la Agenda de Educación 2030
No hay comentarios:
Publicar un comentario