sábado, 13 de agosto de 2016

Detalle para cumpleaños esposa - 2016

 

 
Mi esposa cumplía sus primeros ticinco y piquito años, al día siguiente de nuestro aniversario de matrimonio, por lo que como todo macho que se respeta buscaba a hurtadillas una canción o poema para ofrecerle el momento que se despierte.

Listas de reproducción con temas (cumpleaños o aniversario) existen en Youtube, algunas de muy buena calidad y con temas profundos (directos al corazón, sinónimo de apertura de botella, para los adoradores del dios Baco). El punto del millón es que le agrade a una persona de gustos refinados, que me eligió a mí como su consorte. 

Decidí hacer un compendio de algunas, con mi buen criterio y gusto, para ofrecerle conjuntamente con el desayuno. Por cierto consideré las mejores prácticas desde mi experiencia en análisis de productos y ofertas en proyectos de ingeniería para desarrollar un estudio del estado del arte: posición del autor, número de referencia de uso del producto, diseño del video, que no salgan mujeres anorexicas y ligeras de ropa. En medio de esta misión, fui sorprendido in fraganti por la susodicha y con el desayuno en veremos.

Escuchamos la lista de canciones y concluí que definitivamente que, para una fanática de Chayanne, cualquier mortal es ameba.

Les comparto el fruto de mi investigación y anhelo que en su momento les pueda ser útil. Todo lo escrito en cuestión de gustos y sabores queda en entredicho y sin sustento.

Cuando me casé, hace 21 años, no era un Adonis pero si atraía las miradas de las féminas que pululaban por mi alrededor: mi 1.68, con la mirada enigmática (por los lentes que usaba, fruto de mucha miopía y astigmatismo), la fibra firme  distribuidas a los largo de mi anatomía, no era para menos.

Con el matrimonio, caí en las redes de parte de mi amada mujer que me quiere solo para ella, el volumen de mi cuerpo ha aumentado y mi galante porte se ha convertido en algo intelectual. Prepara los alimentos tan bien que es una ofensa dejar algo de lo que nos sirve. Suelo decir: que los celos enfermizos de mi esposa, me tiene en esta situación para que ninguna mujer se fije en mí. Esto será motivo de otro comentario con el dicho completo. 

Como es una cortesía para mi esposa, me indicó que debía ser a su gusto, obligándome a incluir estos temas. Que en realidad comparto su docto criterio. 

Del desayuno nos olvidamos, por lo que al levantarse los hijos (dos bìpedos depredadores que clamaban por comida, como todo adolescente que se respete) salí a proveer (comprar) los alimentos. 

Como pueden observar en mi casa, todavía se mantiene la distribución del trabajo de los primeros HomoSapiens y mientras refunfuñaba mi esposa me recordaba que yo tenía la última palabra. Ante lo cual asentí y fui rápido (y furioso) al mandado.

Lo más seguro es que esta lista se modifique, si conozco a quién soporta mis rujidos, porque yo no ronco sino rujo.
 



 

 

2 comentarios: