El 2017/11/26 se realizó la Cita de diablos en Alangasí, evento impulsado por la Administración Zonal del Valle de los Chillos, del Distrito Metropolitano de Quito.
Mi hijo, César Alberto, tenía una cita con sus amigos Los Piketeros (Diablada Pillareña), (puede ver el video) quienes colaboraron en un proyecto académico.
Para
realizar fotografías caminábamos con las Delegaciones, a las personas que nos
miraban les decíamos que estos eran nuestros trajes de diablos auténticos y
algunos pedían tomarse una foto.
También
me ofrecía de voluntario para tomarles una foto con sus celulares, posando con
el pobre diablo de la Delegación que sí participaba en el desfile, agradecían por la cortesía.
Luego
que me indicaban como tomar la foto y me entregaban el celular, yo salía en
precipitada carrera con su celular en la mano.
A
los cinco metros, me detenía agotado y regresaba sobre mis pasos, para tomarles
la fotografía, la víctima tenía una de cara de haber sido motivo de una
diablada. El disfrazado de diablo, esbozaba una sonrisa diabólica muy bien
disimulada tras su careta.
Por
cierto, yo posaba con los diablos y pedía a mi hijo que me tomara una foto. También,
en mi ignorancia, pedía a unas bellas damitas que habían asistido al evento si
me permitían que me tomen una foto junto a ellas. Algunas sonreían, otras me
miraban con indignación.
Mi
pobre hijo, no sabía si llorar o negar que tenía alguna relación conmigo.
Al
revisar las fotografías en casa, al ver algunas fotos, mi esposa decidió que
debía purgar algunas penas por las evidencias, argumentaba: “A confesión
de parte, relevo
de pruebas”, y me decía que es
un axioma jurídico que significa que quien confiesa algo libera a la
contraparte de tener que probarlo.
Les comparto la información:
Diablos de Pillaro
Diablos de Riobamba
Diablos de La Merced y Alangasí
A manera de cierre:
Los
Diablos de Alangasí, tenían una oferta, ya que también fueron víctimas del Black
Friday, para conseguir adeptos.
Desde la visión de cada uno de los grupos, su acción cambia y cada una es parte de un legado cultural.
Por supuesto, puede contar la historia en primera persona, sólo se debe dominar los demonios que llevamos dentro, en mi caso todavía estoy purgando la pena impuesta...
Entre otras, algunos de estos malvados diablos: trataban de llevarse a los niños de los brazos de sus padres y hacían caso omiso de sus suplicas, obligaban a los espectadores a ingerir alcohol y para que resbale debía comer parte de un ají.
Desde la visión de cada uno de los grupos, su acción cambia y cada una es parte de un legado cultural.
Por supuesto, puede contar la historia en primera persona, sólo se debe dominar los demonios que llevamos dentro, en mi caso todavía estoy purgando la pena impuesta...
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